La pandemia le ha servido a Nicolás Maduro para sacar de su agenda el tema de las elecciones y la gasolina, dice el periodista Eugenio Martínez

Luego de que el presidente Nicolás Maduro planteara este sábado la posibilidad de postergar en Venezuela las elecciones parlamentarias previstas para este 2020, el periodista Eugenio Martínez, especialista en la fuente electoral, consideró que la pandemia le está resolviendo al mandatario dos problemas básico que tenía para este año: la escasez de gasolina y los comicios.

En una entrevista concedida para el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón, Martínez advirtió que lo dicho por gobernante contradice la ley. Dado que en Venezuela se prohíbe la suspensión del derecho al sufragio, incluso aunque haya sido declarado un estado de alarma, como en efecto se hizo el pasado 13 de marzo en esa nación. 

En las declaraciones ofrecidas para la emisora AM 750 de Buenos Aires, Maduro comentó que la prioridad para el país era atender la crisis del coronavirus; y dijo que sería «una irresponsabilidad» asegurar que se harían las elecciones en medio de la pandemia.

De acuerdo con Martínez, esta situación «cierra las puertas en Venezuela a una transición política a través del sufragio», lo que pone al país frente a una dinámica mucho más compleja de la que ya venía enfrentando.

¿QUÉ ESTABA PREVISTO ANTES DE LA LLEGADA DEL VIRUS?

El experto en temas electorales explicó que el Gobierno de Maduro este año debía acordar la realización de unos comicios presidenciales junto a los parlamentarios. Ya que eso forma parte de una de las propuestas promovidas por la mesa de negociación de Noruega.

Además, se tenía que renovar la directiva del Consejo Nacional Electoral (CNE) y reponer el 98% de las máquinas de votación, que se habían perdido tras un incendio el pasado mes marzo. 

«Al menos para la opinión pública, el comité que se había acordado para la renovación del CNE dejó de trabajar a raíz el COVID-19», sostuvo Martínez.

Asimismo, apuntó que el 2020 era trascendental. Pues la estrategia que había impulsado la oposición venezolana era la de lograr un proceso electoral en donde se respetaran los estándares internacionales.

Eugenio Martínez concluyó diciendo que para finales de año no se solo se trataba de conseguir unas elecciones en Venezuela, sino «unas muy buenas».