“La posición del general Mark Milley deja claro que el ejército estadounidense está del lado de la Constitución y no es partidista”, afirmó la analista política, Paulina Chávez

El general Mark Milley, presidente del Estado Mayor Conjunto, pidió disculpas públicamente por haber acompañado con su uniforme de combate al presidente Donald Trump, en Lafayette Square para tomarse la polémica foto en la iglesia de Saint John.

“No debería haber estado allí. Al estar allí di la impresión que las Fuerzas Armadas están involucradas en la política nacional, y no es el caso”, dijo el general.

Paulina Chávez, periodista y analista política, habló sobre el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.

“Hay que reconocer el gesto que tiene el general Milley. En efecto, después de la fotografía quedó la sensación que el Ejército podría servir directamente a intereses políticos, cuando debe estar al servicio de la Constitución. Estas palabras rescatan el prestigio y la disciplina del ejército. El general Milley destaca por su rango y por su cercanía con Trump”, expresó Chávez.

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Hay una fractura visible en la relación de Trump y el sector militar. La semana pasada el secretario de Defensa y jefe del Pentágono Mark Sper, se pronunció en contra de las declaraciones del presidente sobre la posibilidad de sacar al ejército a la calle, si prevalecía la violencia en las protestas. Asimismo, su antecesor, el reconocido general James Mattis, acusó a Trump de querer dividir a los estadounidenses.

“Milley se une a otros líderes militares que han señalado su inconformidad con la conducta de Trump. Son voces importantes en contra de la actuación del presidente. El ejército debe ser utilizado a combatir otro tipo de adversario y no a los ciudadanos que manifiestan”, dijo la periodista.

Estas declaraciones de los líderes militares en contra de Trump se producen en medio de la campaña política de cara a las elecciones presidencias del 3 de noviembre. Todas las encuestas indican que Trump ha bajado producto de cómo ha manejado la crisis del COVID-19 y del asesinato de Geroge Floyd.

“El presidente no midió adecuadamente los efectos de la famosa foto en la iglesia de Saint John. Desde el punto de vista político trató de enviar un mensaje a su base electoral. Sin embargo, Trump tendría que estar apelando a los votantes independientes. El presidente ha sido errático en el manejo de la crisis de la pandemia y con respecto al tema de las manifestaciones”, agregó Chávez.

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