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Periodista Javier Chávez: «Emma Coronel no es solo la esposa del Chapo Guzmán, también fungía como intermediaria en el Cartel de Sinaloa»

Emma Coronel, la esposa del ex-jefe del cártel de Sinaloa, Chapo Guzmán, se declarará culpable de ayudar a su marido ante una corte federal de Washington DC, dijo el martes una fuente cercana al caso a medios internacionales.

Coronel, de 31 años, fue arrestada en un aeropuerto internacional cercano a Washington el 22 de febrero bajo sospechas de estar involucrada en los negocios de narcotráfico de su marido y de intentar ayudarle a escapar de prisión en México.

Javier Chávez, periodista de investigación, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.

“Emma Coronel es un personaje que podría ser sacado de una novela de narcotraficantes. Ella es una ex-reina de belleza y cobra notoriedad cuando se casa con el Chapo Guzmán. Desde ese momento, su familia ha estado muy relacionada con el Cartel de Sinaloa. Cuando ella obtiene el cetro en el concurso de belleza, se vio al relieve la influencia del narcotráfico”, dijo el periodista.

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La exreina de belleza, madre de dos niñas mellizas que tuvo con el Chapo, fue acusada en una corte de Washington DC de conspiración para distribuir en Estados Unidos un kilo o más de heroína, cinco kilos o más de cocaína, una tonelada o más de marihuana y 500 gramos o más de metanfetaminas.

“Justo lo que investigan en Estados Unidos y el hecho por el cual está presa, es por su colaboración con el Cartel de Sinaloa. Ella no solo es la esposa de El Chapo Guzmán, ella tiene también un papel relevante dentro de la organización. Ella fungía como intermediaria y ayudó a escapar de la cárcel al Chapo Guzmán”, añadió Chávez.

Para el reportero es difícil de descifrar el por qué Coronel viaja a Estados Unidos. “Hay que recordar que ella tiene doble nacionalidad, es mexicana y estadounidense. No es un dato menor que ninguna esposa de un narcotraficante se le había acusado y juzgado como ocurre con ella. En Estados Unidos todavía hay vestigios del Cartel de Sinaloa, sobre todo en Chicago y Nueva York.