La situación económica de Argentina registra niveles de emergencia: la inflación anual supera el 50%, el peso pierde valor cada día y la deuda externa se ha vuelto impagable.
Las reservas internacionales que tiene el Banco Central no alcanzan para cubrir en marzo un vencimiento de 2.900 millones de dólares (2.540 millones de euros) con el FMI, solo una pequeña parte de los 19.000 millones de dólares que debe pagar durante todo 2022. En este contexto, Argentina está urgida de dinero fresco y corre el peligro de buscarlo a cualquier precio.
La reciente visita del presidente Alberto Fernández a Rusia es indicio inquietante de una diplomacia marcada por las urgencias y los inconvenientes que pueden derivarse de ella.
La periodista Vanessa Santana, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
“A nivel de medios se le ha dado bastante cobertura al viaje del presidente Alberto Fernández, sobre todo a sus encuentros con su homólogo chino, Xi Jinping, y el ruso, Vladimir Putin. Lo que se ha dicho, es que Fernández inicia esta gira buscando aliados económicos y diciéndole a Putin que Argentina puede ser la puerta de entrada a América Latina”, indicó Santana.
La gira de Fernández se produce cuando el ambiente político en Argentina se calienta. Hay una fractura importante dentro del gobierno, porque el líder de la bancada peronista en el Congreso, Máximo Kirchner, hijo de la vicepresidenta, Cristina, renuncia a su puesto por maletera con el pre-acuerdo que Fernández llegó con el FMI para pagar la deuda.
El descontento político ya pasó a ser social, porque se han desarrollado masivas manifestaciones en la ciudad de Buenos Aires, condenando el pre-acuerdo con el FMI.
“El presidente Fernández tiene varios riesgos. Es un secreto a voces las discrepancias con Cristina Fernández de Kirchner. Ambos representan dos alas completamente distintas de la izquierda. Hay que recordar que el Congreso debe aprobar el pre-acuerdo con el FMI y las sesiones deberían haber comenzado en febrero, pero después de la renuncia de Máximo Kirchner están paralizadas. Sin duda, estos grupos que han demostrado su descontento forman parte de una realidad precaria”, añadió.
La periodista señaló que en este momento, el presidente Fernández está siendo apoyado por algunos gobernadores y un ala del Congreso.
“Sin embargo, la fuerza que sigue teniendo Cristina Kirchner es grande. Alberto Fernández trata de realizar las alianzas con Rusia y China para ponerle en bandeja de plata el país a esos mandatarios”, explicó Santana.
La reportera indicó que aunque Cristina Fernández de Kirchner no está aspirando a la presidencia, su hijo Máximo si lo hace.
“Máximo Kirchner es la figura política que se está mostrando desde el ala más radical. Él tiene un apoyo de algunos políticos, pero también tiene mucho rechazo”, añadió.
Finalmente, Santana indicó que Alberto Fernández podría sacar ciertas cosas de las reuniones con Putin y Xi Jinping.
“El detalle está en que si esos acuerdos se reflejarán en un aumento de calidad de vida para los argentinos y que logren subsanar toda la crisis económica”, puntualizó.
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