No pasaron ni 24 horas desde que el Tribunal Supremo de Justicia -TSJ- anulara la directiva de Acción Democrática, para que ahora la Sala Constitucional suspenda la Junta Directiva del partido político Primero Justicia.
En su sentencia número 0072-2020, el TSJ nombró una Junta Directiva ad hoc y entregó la presidencia de la organización política al diputado José Brito; y autorizó a la nueva Junta Directiva a utilizar «la tarjeta electoral, el logo, símbolos, emblemas, colores y cualquier otro concepto propio de la señalada organización».
Esta sentencia es un calco de la aplicada al partido político Acción Democrática la noche de este lunes. La presidencia de AD recayó en Bernabé Gutiérrez, y dejó fuera al actual secretario general y líder de AD Henry Ramos Allup.
Ramos Allup calificó la decisión como un «asalto al partido con más tradición en Venezuela» y advirtió que el régimen de Nicolás Maduro iría tras el resto de los partidos opositores. Su predicción se cumplió.
El partido Primero Justicia fue fundado en el año 2000. Sus principales representantes son el excandidato presidencial Henrique Capriles Radonski; el comisionado para las Relaciones Exteriores de Venezuela, Julio Borges; y el diputado Juan Pablo Guanipa. Actualmente forma parte del llamado G4 (principales partidos políticos opositores al régimen de Maduro), junto con Acción Democrática, Voluntad Popular y un Nuevo Tiempo.
De acuerdo con un artículo del experto electoral Eugenio Martínez, publicado por Efecto Cocuyo, el TSJ ha cambiado la directiva a ocho partidos de la oposición venezolana en los últimos años.
José Brito era un militante de Primero Justicia que fue electo en 2015 como diputado de la Asamblea Nacional. A finales de 2019, el portal de investigación Armando.Info vinculó a Brito con el empresario y testaferro de Maduro, Alex Saab (ahora detenido en Cabo Verde) por una operación para «lavar el nombre» del empresario.
Desde ese momento, PJ expulsó de sus filas a Brito, junto con Luis Parra y Conrado Pérez. Todos estos diputados participaron en la llamada Operación Alacrán, para dar un golpe al Parlamento venezolano.
Esta operación consistió en «comprar» diputados para votar a favor de la directiva instalada de Luis Parra. Si bien nunca tuvieron los votos necesarios, y no respetaron el proceso interno de la Asamblea Nacional, el TSJ – en otra sentencia favorable al régimen- reconoció como válida la junta directiva de Parra.
El 16 de enero, José Brito introdujo un documento ante el Tribunal Supremo para anular su expulsión de PJ y solicitar la designación de una nueva Junta Directiva. Sobre este recurso fue que decidió este martes el TSJ.
El excandidato presidencial y líder de PJ, Henrique Capriles Radonski, aseguró que el TSJ solo se ocupa «de la enferma ambición de poder de Maduro», y afirmó que el partido «es y será de su gente».
Por su parte, el diputado y dirigente de Primero Justicia, Juan Pablo Guanipa, afirmó que «es tiempo de resistencia». Asimismo, el partido político Voluntad Popular se solidarizó con la tolda amarilla y señaló que esto es «un guion repetido con el cual pretenden instaurar un estado totalitario».
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