COLOMBIA ELIGE SU FUTURO

FA/CMR

Este 13 de marzo próximo serán las elecciones legislativas en Colombia y el 29 de mayo las presidenciales, se realizan con un electorado descontento y desconfiado, coaliciones de partidos fragmentados y sin verdadera conexión popular y una larga lista de candidatos.

Según encuestas del Observatorio de la Democracia, el 80% de los colombianos no se identifica con ningún partido político, y hay poca confianza en el Congreso y otras instituciones. Para las primarias son más de 15 candidatos en medio de coaliciones poco sólidas.Ninguno de los muchos candidatos a la presidencia colombiana supera el 30% de intención de voto y la gran mayoría no llega ni siquiera al 10%. 

Aunque el domingo 13 de marzo, Colombia escogerá a los 108 senadores y 171 representantes, en la práctica se consideran “elecciones primarias”, definiendo quiénes de esos 15 terminarán yendo a la primera vuelta presidencial. 

Las coaliciones agrupan a figuras nuevas y viejas de la política, partidos y movimientos en tres grandes toldos: el Pacto Histórico (coalición de izquierda) que gravita alrededor de Gustavo Petro, ex alcalde y senador. También están como candidatos del Pacto,  Francia Márquez, Camilo Romero, Arelis Uriana y Alfredo Saade entre otros. 

En el caso de la Coalición Centro Esperanza los candidatos son Juan Manuel Galán, Sergio Fajardo, Jorge Enrique Robledo, Carlos Amaya y Alejandro Gaviria

En el Equipo por Colombia los aspirantes son Aydeé Lizarazo, Alejandro Char, David Barguil, Enrique Peñalosa y Federico Gutiérrez.

De manera independiente y por el partido que ella misma fundó, Verde Oxígeno, va Ingrid Betancourt

Pero estas elecciones  vienen acompañadas también de innovaciones como tarjetones re-diseñados para tratar de reducir los votos nulos, urnas separadas entre Senado y Cámara, ampliación de los puestos de votación, y un software propio de la Registraduría y el Consejo Nacional Electoral (CNE).

38,5 millones de personas decidirán el destino de su país en medio de una clara crisis de partidos con potenciales problemas de gobernabilidad. Pero con una frontera tan permeable, la decisión no sólo incidirá en la vida de los colombianos sino en la de todos los venezolanos dentro de Colombia y en nuestro país.