Durante su programa En Conexión, César Miguel Rondón entrevistó a Molly de La Sotta, hermana de preso político en Venezuela, con la intención de conocer una actualización del estado de salud de su hermano detenido por cuerpos de seguridad venezolanos.
El capitán de Navío, Luis de La Sotta permanece bajo tortura en los calabozos de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim). A pesar de que cuenta con medidas de protección de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
De igual forma, «Su caso aparece en la Misión Independiente de Determinación de los Hechos por delitos de Lesa Humanidad de la Organización de las Naciones Unidas, como el caso número 13» explicó la politóloga de La Sotta.
#Venezuela. #Urgente. Tirania esta TORTURANDO hasta la MUERTE al Cap de Navio Luis de La Sotta, preso politico enterrado en 3er sótano del #DGCIM. Presenta casi paralización d los riñones y esta muy delicado d salud. El tiene cautelares @CIDH y exigencia d libertad @ONU_derechos pic.twitter.com/QPpLCX2Kgu
— Tamara Suju (@TAMARA_SUJU) January 27, 2021
En principio, la comisión determinó que «él fue víctima de desaparición forzosa a corto plazo, detención arbitraria , torturas y tratos crueles«.
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También, de La Sotta añadió que su hermano no ha sido presentado para un juicio formal en tribunales. Por lo que la ONU recomendó su «liberación inmediata«.
Según de La Sotta, a los militares detenidos en los sótanos del Dgcim «los están ejecutando poco a poco, para después decir ‘se murió y no pudimos hacer nada‘».
Asimismo, pese a que el capitán cuenta con protección internacional, la politóloga asegura que los familiares sienten «frustración e indignación, al ver que el grito de las víctimas no ha llegado a donde tiene que llegar«.
Por su parte, De La Sotta destacó que el caso de su hermano no es el único. «Cualquier militar, del 2014 para acá, que se haya quejado de corrupción, de problemas inconstitucionales, simplemente va preso«.
En Venezuela, los presos políticos no cuentan con acceso a la salud, al debido proceso, y tampoco con estándares mínimos durante la detención. «Tenemos dos años y ochos meses luchando para que salga. Porque está ilegalmente detenido», dijo.
Cabe destacar, que en materia de salud la hermana del capitán aseguró: «Sus funciones renales están en peligro. Y en un año, no nos han permitido un diagnóstico para hacerle un tratamiento»
Finalmente, sentenció De La Sotta «A lo único a lo que le temo es a que mi hermano no salga vivo de ahí«.
