La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, anunció sorpresivamente que dejará su cargo en el mes de febrero.
«Ya no tengo suficiente (gasolina) en el tanque», dijo una emocionada Ardern al hacer pública su próxima renuncia.
La política, 42 años, explicó que sus casi 6 años «desafiantes» en el cargo le habían pasado factura y no se ve con fuerzas para presentarse a las elecciones generales que se celebrarán en octubre en su país.
La periodista Andreína Flores abordó el tema en el programa En Conexión Radio, conducido por César Miguel Rondón.
“La verdad es que la decisión de Ardern es una sorpresa para muchos. Ella se había destacado mucho por todo lo que fue la gerencia del COVID-19 y su lucha contra el cambio climático y la economía de su país. No obstante, ese apoyo comenzó a decaer porque prolongó mucho las restricciones del COVID-19 y ha habido un declive económico. Nueva Zelanda tiene una inflación de 7.2%, ha habido un aumento del precio de la gasolina y esa fascinación que tenía la gente ya no estaba tan alta. Eso le jugó en contra. Además, se aducen razones personales”, dijo Flores.
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La periodista señaló que Ardern se quiere casar con su prometido y ha dicho que quiere pasar más tiempo con su hija.
“Estoy un poco decepcionada, porque Ardern había representado esa generación de mujeres fuertes y jóvenes, que son capaces de logros importantes como el manejo de un país, con brisas de aire fresco. Verla hoy al borde de las lágrimas y decir que no tiene más, es como ver caer a un ídolo. Vimos a Angela Merkel que tuvo 16 años como canciller de Alemania o Hillary Clinton. También está la reina Isabel”, señaló.
Finalmente, Flores destacó que habría que hacer un análisis del por qué los líderes de antes no renunciaban y ahora sí.
“Creo que ahora está mucho más permitido hablar de la salud mental, el cansancio físico y el equilibrio con la vida privada, y de ciertas debilidades de los seres humanos. Eso abre la puerta de que la gente baje los brazos”, puntualizó.
