El censo en los Estados Unidos se está llevando a cabo, pero hubo una comunicación del Secretario de Comercio de los Estados Unidos, Wilbur Ross, quien afirmó que el censo se cerrará un mes antes de lo previsto.
Al mismo tiempo, el presidente Trump ordenó por medio de un memorando al Departamento de Comercio, «hacer todo lo legalmente posible para excluir a los inmigrantes ilegales en el conteo del censo 2020».
La directora de la revista Familia y vocera el censo 2020, Adriana Carrera, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
«Estamos en una carrera contra el tiempo. Cortar las fechas del 31 de octubre al 30 de septiembre ha puesto a toda la maquinaria del censo en una carrera contra el tiempo. No es una decisión muy fácil, estamos a nivel nacional a 63.4% de respuesta. Nos falta más de un 37% que es vital, porque los fondos federales dependen de eso. Estamos en una situación crítica. No vamos a esperar 10 años más para que las comunidades reciban esos fondos. En el caso del sur de Florida no estamos bien. Miami no llega al 60% y muchas ciudades dentro de Miami Dade que apenas llegan al 36% de respuestas. Ya se está entrenando a la gente para que trabaje de forma muy rápida. Acerca de lo que ha dicho la administración Trump, es que además de los fondos también se distribuye el mapa político, porque es posible que se añadan dos escaños al Congreso por Florida. Lo que no quiere la administración es que la gente influya en los escaños políticos. Y las personas que no tienen documentos podrían influir en ese aspecto. Sin embargo, no hay forma de saber quien tiene documentos o no, en el censo no se pregunta eso», descrito Carrera.
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Algunos analistas afirman que la intención de Trump de trastocar el censo es para desalentar la participación de un sector de la población que se inclina por el Partido Demócrata y sesgar los conteos para redirigir el presupuesto federal y la representación en el Congreso.
«Nosotros los periodistas no sabemos porque se adelanta el cierre del censo. Estamos en un año electoral. No sé si los políticos quieren terminar el censo antes. La gente del censo quiere terminar después de las elecciones, porque hay mucho por hacer. Hay gente que de pronto no tiene la tecnología para inscribirse en el censo. Se necesitan personas que vayan a las calles a censar. También está el tema del COVID-19. Las personas deben ir casa por casa, pero es un riesgo que la gente no debería esperar. Es la situación que estamos viviendo ahora», agregó la periodista.
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