Las agencias federales de salud en los Estados Unidos pidieron el día de ayer suspender inmediatamente la vacunación con Johnson & Johnson, luego de que se registraron seis casos de trombosis entre las 6,8 millones de dosis aplicadas en el país.
Los CDC convocarán una reunión del Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización (ACIP) este miércoles para estudiar a profundidad estos casos y evaluar su importancia.
Todos los casos de trombosis registrados hasta ahora se dieron en pacientes mujeres, de entre 18 y 48 años, según informaciones de The New York Times.
La doctora Lilian Abdo, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
“Hay una desproporción y en estos casos la FDA está siendo cautelosa. Lo que indica es que hay una señal de alerta por los casos de trombosis. Todos los casos han sido en mujeres que comprenden entre 18 y 48 años Además se pudo observar que los niveles de plaquetas en todos los casos estaban bajos. Es solo una alerta que se investigará. Lo mismo ocurrió con la vacuna de Oxford que se paralizó hasta que se investigó y luego como no se encontró que los casos eran vinculantes, se continuó con la vacunación”, indicó la doctora.
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Algo similar ocurrió con la vacuna de AstraZeneca, a la cual muchos gobiernos han perdido la confianza en esa vacuna.
“Es muy fácil decir que seis personas de un millón desarrollaron la trombosis, pero 999.000 no la desarrollaron la data se ve diferente. La mayoría de las personas no tuvieron un efecto secundario, pero lo que se ha creado es una señal de alerta para no ignorar los casos. No obstante, no hay que entrar en pánico”, agregó la experta.
Para la doctora, la probabilidad de desarrollar un trombo por infección por COVID-19 es mucho mayor por desarrollar un trombo por la vacuna. “Fumar o tomar la píldora anticonceptiva, tienen un riesgo más alto que la vacuna”, agregó.
La FDA hará una junta este miércoles para determinar si la vacuna Johnson&Johnson se podrá seguir suministrando en los Estados Unidos.
“También sabemos que Johnson&Johnson por razones de materia prima tuvieron que disminuir la producción a un 84%. Afortunadamente en Estados Unidos todavía está Pfzier, Moderna y otras vacunas. Hay suficientes vacunas en todo el país. En la mayoría de los centros ya se vacuna sin cita. Hay que continuar vacunando a la población para poder parar la pandemia”, comentó Abdo.
Para la doctora los resultados de la vacunación en los Estados Unidos son optimistas. “Sin embargo, como latinoamericana y venezolana, siempre pienso más allá de las fronteras de los Estados Unidos. El país no es una burbuja y todo dependerá de lo que pase en Latinoamérica porque la pandemia es global. Si en Latinoamérica la gente continúa sin acceso a la vacuna y hay disparidades en salud, el virus puede continuar mutando hasta que se cree una cepa que sea inmune a las vacunas”, añadió.
Finalmente Abdo hizo un llamado para que las personas sigan utilizando la mascarilla y cumpliendo el distanciamiento social. “Estamos todos cansados y queremos que la pandemia se acabe, pero es momento de seguir utilizando las medidas de bioseguridad. Hay que aumentar la producción de vacunas a nivel nacional y mundial.
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