En otra alocución del pasado miércoles 9 de febrero, Maduro volvió a insinuar que las elecciones presidenciales que estarían previstas para el año 2024, podrían posponerse.
Entre las motivaciones que tendría Maduro para aludir de esa forma a los comicios presidenciales, es ejercer presión a los Estados Unidos y a la Unión Europea para que retiren las sanciones.
Asimismo, expertos descartan que Miraflores acepte adelantar elecciones presidenciales antes de 2024 o que vaya a conceder mayores condiciones electorales que las otorgadas hasta ahora.
El periodista Pedro Pablo Peñaloza, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
“Esto hay que verlo desde dos perspectivas. Una es la provocación de Nicolás Maduro, una vez eliminado el referéndum revocatorio, se ha venido arriba con este discurso. Pero más allá de eso, no se puede tratar a la ligera como si fuera una burla de Maduro. Si bien no ha ocurrido en el caso de una elección presidencial, es cierto que elecciones regionales se han postergado. Hay que decir que en el caso de las elecciones presidenciales, si se ha respetado el año, pero se ha manipulado la fecha. Recordemos las elecciones de 2012, que se adelantaron para el mes de octubre por las condiciones de Hugo Chávez. Igualmente, en el año 2018, las elecciones fueron en el mes de mayo. En este sentido, se muestra que el chavismo si manipula el calendario de las elecciones, según su conveniencia”, dijo Peñaloza.
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Más allá de las declaraciones de Maduro, el venezolano de a pie ya no habla de política. A pesar de la victoria opositora en el estado Barinas a principios de año, la desconexión de los venezolanos con la política persiste. Incluso, lo que se muestra en redes sociales es una sociedad frívola, celebrando una fiesta en la cima de un tepuy.
“Cuando se eliminó el referéndum revocatorio hubo cierta coincidencia entre sectores de la oposición y el chavismo. Por ejemplo, hay sectores de la oposición que abiertamente celebraron la eliminación del referéndum revocatorio. Igualmente, pasó en el chavismo. Posteriormente, esas coincidencias también se dan en el caso de la renovación de los poderes públicos, comenzando por el CNE. Hay dos rectores que se vinculan por la oposición, pero ni en la oposición se reconoce su trabajo. También lo vemos en el caso del Tribunal Supremo de Justicia. Hay otra coincidencia con los gobernadores de oposición, que van y le estrechan la mano a Maduro para poder trabajar juntos. Allí se busca un espacio de convivencia. Finalmente, hay cierta coincidencia con la crítica al gobierno interino”, explicó el reportero.
Para Peñaloza, todo ese escenario tiene un impacto sobre la política y hace que el debate dentro de la sociedad venezolana sea más moderado y se busquen espacios de entendimiento.
“Hay que ver lo que pasa dentro de la oposición, que en vez de estar enfrentando a Maduro, está ocupada en sus problemas internos”, destacó.
Finalmente, Peñaloza acotó que dentro del chavismo también hay ciertas diferencias.
“La designación del Tribunal Supremo de Justicia es la que indicará cómo estás las fuerzas dentro del chavismo. Cada uno va apostar por sus fichas. Maduro tiene toda la intención su aspiración de reelección y se nota que tiene control dentro del chavismo. Se sabe que Diosdado Cabello es la voz radical y que siempre amenaza, pero pareciera que el chavismo también está buscando acciones más moderadas. La designación del TSJ es un elemento clave para el futuro de la política venezolana”, puntualizó.
