El Vaticano informó que el Papa Francisco consagrará a Rusia y a Ucrania al Inmaculado Corazón de María en una liturgia por la paz el próximo 25 de marzo.
Monseñor Jesús González de Zárate, presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
Hay que aclarar que la consagración al Inmaculado Corazón de María ya fue realizada un 25 de marzo de 1984 por el Papa Juan Pablo II. En ese momento, se dio a conocer por la Santa Sede lo que sería el último secreto de Fátima. Este acto que hizo el Papa fue entregar a Rusia al Inmaculado Corazón de María. Este acto al que nos invita el Papa está dentro de la línea de continuidad, pero se realiza en un contexto nuevo. No solo hay una consagración de Rusia, sino también de Ucrania”, dijo González Zárate.
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El sacerdote indicó que el sentido que tiene el acto, será llegar a la paz y al entendimiento de las naciones.
“Somos hermanos todos. Hay que lograr el entendimiento y el diálogo. Esta acción se une a muchas intervenciones del Papa, tanto del lado ucraniano como del ruso, para tratar de lograr el cese de una guerra que no tiene ningún sentido. En definitiva debe reinar la racionalidad y la vía diplomática por encima de la violencia. Esto es una derrota para la humanidad entera”, destacó,
Para el presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, la oración siempre pone de manifiesto la primicia de Dios.
“Cuando se invoca un acto como este, no es que se espera que de un modo mágico se acabe la guerra, pero lo que quiere poner de manifiesto el Papa es que la humanidad entera está implicada en el conflicto, porque la guerra es una cuestión de humanidad”, acotó.
Finalmente, González Zárate explicó que el Papa hace un llamado a la oración, lo que hace que los creyentes tomen conciencia de que el camino para la resolución del conflicto debe ser en paz.