Los negociadores del Senado alcanzaron el martes un acuerdo en un proyecto de ley bipartidista sobre la violencia armada, lo que podría allanar el camino para que el fin de semana se apruebe el paquete gradual pero histórico con el que el Congreso de Estados Unidos respondería a los tiroteos masivos en Texas y Nueva York que conmocionaron a la nación.
Luis Fleischman, internacionalista y profesor de sociología en Palm Beach State College, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
“Es interesante porque las implicaciones del acuerdo político para los votantes y los ciudadanos son distintas a las implicaciones que tienen para los político. Solo dos senadores republicanos que van a la reelección votaron a favor de este arreglo. Eso significa que hay más senadores que van a la reelección que no quisieron arriesgar por el temor de no ser reelegidos”, dijo Fleischman.
El analista destacó que según las estadísticas, un tercio de los votantes republicanos apoyan a algún tipo de arreglo por el control de armas.
“Todos estos tiroteos han afectado a hijos de republicanos y demócratas por igual. Hay una paranoia dentro de los republicanos por saber cómo los votantes piensan, pero temen a una campaña muy agresiva por parte del lobby de armas, que pueden demonizar a un candidato porque apoyó a una legislación”, explicó.
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Más allá del acuerdo bipartidista, cada día vemos a figuras radicales dentro del Partido Republicano como Marjorie Tylor Green u otros aspirantes a candidatos que salen afiches armados hasta los dientes.
“El Partido Republicano está pasando por una tragedia muy fuerte. Por ejemplo, hubo republicanos que han dicho que el 6 de enero fue una forma de discurso público. Se está apelando a los principios constitucionales para justiciar actos de violencia”, explicó.
Finalmente, Fleischman destacó que estamos en presencia de una legitimación de la violencia.
“Estamos hablando de una colonización del Partido Republicano por parte de sectores extremistas. Esto pasa porque los otros políticos republicanos lo permiten. El Partido Republicano se ha convertido en un partido ajeno a los principios constitucionales y a la defensa de la democracia”, puntualizó.