La Corte Suprema de Estados Unidos está a punto de enfrentarse a un nuevo caso de elecciones, una impugnación liderada por los republicanos que pide a los jueces un fallo novedoso que podría aumentar significativamente el poder de los legisladores estatales sobre las elecciones al Congreso y a la presidencia.
El máximo tribunal del país tiene previsto escuchar los argumentos el miércoles en un caso de Carolina del Norte, donde los esfuerzos republicanos por trazar distritos congresuales fuertemente a su favor fueron bloqueados por una mayoría demócrata en la Corte Suprema del estado porque el mapa del Partido Republicano violaba la constitución del estado.
El periodista Rafael Mathus Ruiz, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
“La discusión de fondo que ha llegada hasta la Corte Suprema, como muchas otras discusiones, es sobre quién tiene el poder para controlar las elecciones en el país. Es un tema muy sensible porque la de la resolución que se llegue, muchos creen que depende la democracia de Estados Unidos. Este es un país donde los estados tienen mucho poder, y dentro de ese poder está incluido cómo se realizan las elecciones y sus reglas. Esto pone a Estados Unidos en una liga muy distinta en otros países de América Latina que tienen una autoridad federal que controlan las elecciones. Esto tiene como consecuencia que los escrutinios caóticos se demoren hasta una semana. La discusión es si los estados republicanos establecerán en sus legislaturas leyes propias para las elecciones, y si crearán sus propios mapas electorales, lo que conlleva un riego para la izquierda del país. Lo que puede haber es una intoxicación electoral que pueda dañar a la democracia”, dijo Mathus Ruiz.
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El periodista indicó que en entre esas reglas está, por ejemplo, la certificación de la votación y la exigencia de tener un documento para votar.
“Los demócratas acusan que los republicanos quieren dañar el voto de las minorías afroamericanas. Hay una preocupación de que si se le da el control pleno a las legislaturas estatales para decidir cómo se realizan las elecciones, puede desembocar en que el resultado de las elecciones termine siendo pervertido, de acuerdo a la voluntad del poder de turno”, agregó.
Otro tema que está causando revuelo y que está dentro de la Corte Suprema, tiene que ver con la diseñadora gráfica de Colorado que se niega a hacer invitaciones para bodas gays.
“Hay valores históricos de Estados Unidos que chocan. No solo es una disputa sobre los derechos de las minorías gays del país. También es una disputa por la igualdad de expresión. Lo que esta mujer argumenta, es que es parte de su derecho de expresarse libremente, y es su derecho rechazar clientes, este caso por motivos discriminatorios. La Casa Blanca dijo claramente, que el derecho de la libertad de expresión no puede interferir con la igualdad ni la inclusión”, puntualizó.
