FA/CMR
A partir de ayer Estados Unidos se suma a Australia, Nueva Zelanda, Nepal y Canadá, entre otros, que permiten que sus ciudadanos designen otro género, aparte del masculino o femenino, en sus pasaportes.
El Departamento de Estado de Estados Unidos informó este miércoles la emisión del primer pasaporte en el que un ciudadano ha marcado una casilla representada con una X para designar su género, como tercera opción frente a la de femenino o masculino.
Para hacerlo quien lo solicita ya no requiere una certificación médica basta con decir que no se identifica con el sexo que se le otorgó al nacer y que se refleja en sus documentos oficiales.
Ya el lunes pasado en una declaración reconociendo el Día de la Conciencia Intersexual, el Departamento de Estado señaló que era política de Estados Unidos poner fin a «la violencia y la discriminación por motivos de género, orientación sexual, identidad o expresión de género y características sexuales»
La experiencia en otros países resulta reveladora. Nueva Zelandia es pionera. Allí es posible registrar su sexo en el certificado de nacimiento como «indeterminado / intersexual / no específico».
En 2007, el Tribunal Supremo de Nepal introdujo formalmente un tercer género.Desde 2015, los nepaleses han podido especificar un tercer género en sus documentos de identificación y este año en el censo se introdujo la opción por primera vez.
A partir del 2009, en los documentos nacionales de identidad, los pakistaníes pueden elegir un «tercer género».
También en la India, pudieron elegir, por primera vez, en sus registros al lado de «masculino» y «femenino», la opción «otro» ese mismo año.
En Australia, el Tribunal Supremo dictaminó en 2014 que, además de las mujeres y los hombres, hay un género «neutral” que puede registrarse legalmente ante las autoridades. El género se llama «no específico», por lo indefinido.
A finales del 2017, Alemania reconoce la existencia del tercer sexo.
En el caso de Canadá, desde 2017, los Territorios del Noroeste del país emiten certificados de nacimiento con una «X» en lugar de «femenino» o «masculino». En los pasaportes, la «X» puede ingresarse en todo Canadá.
Esta mañana entrevisté sobre este tema en mi programa radial matutino a Fanny Catalina Gómez Lugo, abogada venezolana, profesora adjunta en temas de género y diversidad de la facultad de derecho de la Universidad de Georgetown. Fanny dijo que: “En EE.UU, el 1,7% de la población, es decir, una de cada 1000 personas que nacen en el país tienen estas características intersexuales. Por lo que esta acción beneficia a millones de personas, y significa “el reconocimiento por parte del Estado de que existen personas que no se sienten identificadas o que no entran dentro del binario femenino/masculino hombre/mujer”
De lo que se trata es de respetar el derecho humano y de hacerlo respetar. Como decía la abogada Lugo, “El momento en el que el Estado no reconoce la existencia de estas personas por fuera del binario, lo que está haciendo básicamente es alimentar o fomentar violaciones a los DD.HH”
¿De qué se trata finalmente un documento de identidad? De que pueda saberse en pocas palabras quién eres, de dónde eres, qué edad tienes. Ese quién eres pasa por asumir tu propio género con libertad. Definitivamente, cuando una persona tiene documentos que reflejan su verdadera identidad, su verdadero yo, vive con mayor dignidad y respeto.
