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El hambre que se esparce como semilla en África y algunos países del tercer mundo tras la invasión a Ucrania, el mayor granero del mundo, parece que podría contenerse en algo si las reuniones que lleva a cabo el secretario general de la ONU, António Guterres entre Ucrania y Rusia con la mediación de Turquía tienen éxito.
Recordemos que el 24 de junio pasado, Guterres advertía que “Existe un riesgo real de que se declaren múltiples hambrunas en 2022 Y que 2023 podría ser aún peor”.
Guterres señalaba en junio, además de las consecuencias de la pandemia y la guerra, que las cosechas en Asia, África y las Américas se verían afectadas a medida que los agricultores de todo el mundo luchaban para hacer frente al aumento de los precios de los fertilizantes y de la energía.
El acuerdo que se espera obtener ahora entre Rusia y Ucrania es la creación de un mecanismo para permitir que los buques de carga transporten aproximadamente 20 millones de toneladas de granos, trigo, maíz y cebada, atrapados en Ucrania como resultado de un bloqueo ruso de los puertos de Ucrania en el Mar Negro. De otra forma éstos granos y los que se produzcan en la cosecha de verano podrían desperdiciarse.
El secretario general de la ONU, dijo que Rusia y Ucrania han logrado un «progreso muy sustancial» tras la primera ronda de conversaciones y sugirió que se podría llegar a un acuerdo final la próxima semana, cuando se llevará a cabo una segunda ronda de negociaciones respaldadas por la ONU.
Como reporta The Financial Times, Guterres señaló: “Ojalá podamos tener un acuerdo final” y advirtió que requerirá “mucha buena voluntad y compromiso” por las partes. “Lo han demostrado, estoy animado, soy optimista…Pero aún no está completamente terminado”.
Guterres dijo que era importante recordar que las negociaciones de granos se estaban llevando a cabo “en medio de un conflicto sangriento”, y agregó: “La gente sigue muriendo, los combates continúan, pero las noticias esperanzadoras de Estambul muestran la importancia del diálogo”. Advirtió, sin embargo, que si bien los avances en Estambul “demostraron que las partes son capaces de tener un diálogo constructivo”. . . para la paz todavía tenemos un largo camino por recorrer”.
