La vicepresidente de los Estados Unidos, Kamala Harris, visitó México en su primer viaje internacional. La llegada de Harris coincide días después de las elecciones de medio término, donde el partido Morena de Andrés López Obrador perdió la mayoría calificada en el Congreso.
Fausto Pretelin Muñoz de Cote, analista internacional y editor de El Economista, analizó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
Las expectativas son muy importantes y elevadas. Primero Kamala Harris es un personaje muy interesante. Segundo, porque se reactiva una nueva relación entre México y Estados Unidos. López Obrador ha sido una sombra desde la llegada de Biden a la Casa Blanca. Hay que decir que en la campaña electoral que pasó, se vio un discurso antiestadounidense, pero hoy veremos la nueva realidad. Finalmente, también está el desarrollo del triángulo norte entre Guatemala, Honduras y El Salvador. El tema de la corrupción también estará sobre la mesa”, dijo Muñoz de Cote.
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Durante los años anteriores se pudo apreciar la afinidad de López Obrador con el presidente Trump. No obstante todo ha cambiado. No solo hay una nueva administración en Washington, sino que el presidente mexicano viene de sufrir varios golpes en las elecciones de medio término.
“El domingo pasado el presidente recibió tres menajes. Hubo una debacle de su partido en Ciudad de México, ha perdido la mayoría calificada, y el tercer elemento es que si pudo ganar gobernaturas importantes. No obstante, López Obrador llega debilitado al encuentro con Harris. En ese sentido, necesita estar asentado en la realidad de que nuestro país necesita de los Estados Unidos. También tiene que cumplir los compromisos del T-Mex”, añadió el analista.
Para el periodista, este acercamiento le dará a López Obrador una visión de lo que quiere Estados Unidos de México y a la inversa. “La situación es distinta y el presiente mexicano necesita una interacción con los Estados Unidos en temas económicos y de seguridad”, señaló Muñoz de Cote.
