La ciudad de Nueva York ha sido una de las ciudades más afectadas en todo el mundo. No obstante, el drama no solo se refiere al COVID-19, las alarmas están encendidas por la ola de tiroteos que se han producido en los últimos meses.
Según la información revelada por la Policía Departamental de Nueva York, el pasado mes de junio fue el más violento en los últimos 23 años. Solo el fin de semana del 4 de julio, 64 neoyorquinos fueron heridos por disparos, de los cuales 12 fallecieron.
El periodista de El Diario de Nueva York, Jesús García, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
«Es bastante complicado. El departamento de policía está enfrentando una situación crítica en Nueva York. No es un problema reciente. La alerta comenzó en enero con la reforma de ley para liberar a cientos de reos. Varias organizaciones advirtieron sobre los riesgos de liberar a estas personas. Cuando se empieza a aplicar esta ley, llega la pandemia del coronavirus y el temor de que se expandiera por todas las cárceles. En consecuencia, las autoridades liberaron a los presos que consideraban de baja peligrosidad. Sin embargo, muchos de ellos resultaron ser violentos. Comenzó un aumento de otros delitos como violaciones y robos, hasta que los tiroteos explotaron en junio. Hay un video que liberó la policía, donde una familia va caminando con su hija y se ve cómo fueron ejecutados desde un automovil», dijo García.
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La respuesta del alcalde Bill de Blasio fue prometer el reforzamiento en los barrios más afectados por la violencia armada que son el Bronx y Brooklyn. “Debemos duplicar la presencia policial”, dijo.
«Los agentes policiales en Nueva York están temerosos de realizar operativos muy fuertes y que sean acusados de abuso policiaco. Lo que está ocurriendo es un problema peligroso para el departamento de policía. Hasta el momento se han producido alrededor de 700 detenciones. Sin embargo, detienen a las personas y las liberan inmediatamente por dos razones. La primera es la ley de fianza y la segunda es que las cortes no están funcionando a tiempo completo y como no se pueden realizar juicios de manera inmediata, los individuos son liberados. La reducción de más de mil millones de dólares a las policías también complica las acciones que puedan tomar. No hay un plan claro sobre cómo se pueda solventar esta situación», explicó el periodista.
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