Este domingo cuando se realicen las ilegítimas votaciones para elegir un nuevo Parlamento, los opositores hechos a la medida de la dictadura chavista, sólo podrán optar a una porción muy pequeña de los 277 escaños, pues el PSUV espera controlar 239 de ese total, es decir, más de los tres cuartas partes del nuevo Parlamento.
Según la organización, Súmate, si se asume que el comportamiento electoral sea similar a lo que se observó durante el evento presidencial celebrado en el año 2018, el PSUV capitalizando 59.7% de los votos nacionales pudiese obtener 239 curules (86,3%) de la próxima Asamblea Nacional.
Como señala Eugenio Martínez, en el Diario de Las Américas, los partidos opositores Avanzada Progresista. Cambiemos, Soluciones, Movimiento al Socialismo y Esperanza por el Cambio; así como los desertores de fuerzas políticas a los que el Supremo chavista les regaló la directiva de partidos como Acción democrática y Voluntad Popular, sólo podrían alcanzar en el mejor de los casos, 38 curules.
Recordemos que el TSJ y el CNE, ambos cuerpos ilegítimos, acordaron aumentar de 167 a 277 la cantidad de integrantes del Parlamento venezolano, sumando 110 nuevos curules, que se distribuyen así:
Se pasa de 113 a 130 diputados nominales, electos por nombre y apellido en las mismas 87 circunscripciones de 2015. Se pasa de 51 a 96 diputados por listas Estatales (entre 24 entidades Federales). Electos por Método d’ hondt simple en listas estatales que asignan entre 3 y 10 Diputados. Pero, las cifras de proyección poblacional fueron manipuladas discrecionalmente para intentar justificar la distribución no proporcional de los escaños en las diversas entidades, favoreciendo la sobre-representación de los estados más pequeños.
Se asignaron discrecionalmente con el objetivo de sobre-representar a los estados con menor población y a sub-representar a los estados donde se concentra la mayor cantidad de ciudadanos. Siete de los diecisiete nuevos diputados nominales (41,2%) fueron asignados a circunscripciones donde el índice poblacional no justifica el incremento (pocos electores), afectando todavía más la ya sesgada distribución de las circunscripciones y cargos nominales a elegir en cada una.
Se crea una “lista de adjudicación nacional” que asignará 48 diputados nacionales electos por método d’ hondt simple, agrupando los votos obtenidos por los partidos nacionales en las listas estatales.
Y se concuerda que 3 escaños indígenas se escogerán en una fecha distinta al 6 de diciembre, a través de mecanismo a mano alzada en una primera fase de un proceso de selección en segundo grado.
Pero ¿Cómo será la participación? ¿se prestarán los venezolanos a la farsa?
En la más reciente encuesta flash realizada por Consultores 21, con una muestra telefónica de mil personas, los datos arrojan que el 78% de los electores se niegan a participar en los comicios del 6 de diciembre.
Todo lo cual significa que la dictadura chavista se hará con el control de la Asamblea Nacional con apenas 22% de los electores que asistirán a sufragar. Una quinta parte del Registro Electoral Permanente (REP).
¿Está usted dispuesto a sepultar con su voto lo que queda del sistema político, alternativo y democrático que una vez tuvimos los venezolanos?
