FA/CMR
Ayer, por tercera vez este a帽o, los republicanos bloquearon la legislaci贸n para reforzar los derechos del voto. La votaci贸n fracas贸 51 a 49, con 60 votos necesarios para hacer avanzar la legislaci贸n. Por razones de procedimiento, el dem贸crata por Nueva York, Chuck Schumer, l铆der de la mayor铆a, se uni贸 a los 50 republicanos en la votaci贸n no.聽
La acci贸n mantiene un punto muerto sobre la 鈥淔reedom to Vote Act鈥,聽 la Ley de Libertad de Voto, que los dem贸cratas consideran necesaria para contrarrestar los esfuerzos en los estados controlados por los republicanos para imponer nuevas restricciones a la votaci贸n despu茅s de las elecciones de 2020.聽
Esto significa que hay pocas opciones para avanzar en el proyecto de ley fuera de cambiar la regla obstruccionista del Senado. En medio del camino, neg谩ndose a la eliminaci贸n del filibuster, est谩 Joe Manchin.聽
El l铆der de la mayor铆a, Chuck Schumer, hablando en el pleno del Senado despu茅s de la votaci贸n, dijo:
鈥淓stas leyes dificultar谩n la participaci贸n de millones de estadounidenses en su gobierno. Si hay algo que merezca la atenci贸n del Senado, si hay alg煤n tema que amerite un debate en este piso, es proteger nuestra democracia de las fuerzas que est谩n tratando de deshacerla de adentro hacia afuera禄
Sin mencionar聽 directamente a Manchin o al obstruccionismo, prometi贸 seguir luchando, comparando el esfuerzo con los intentos republicanos de garantizar los derechos civiles de las personas reci茅n liberadas de la esclavitud despu茅s de la Guerra Civil.芦Los miembros de este organismo ahora se enfrentan a una elecci贸n. Pueden seguir los pasos de nuestros patriotas predecesores en esta c谩mara. O pueden sentarse mientras el tejido de nuestra democracia se deshace ante nuestros ojos 芦.
Algunos analistas pol铆ticos presentan esta situaci贸n como una encrucijada. O se demuestra聽 lealtad a la democracia聽 estadounidense y a sus ciudadanos o se bloquea una salida urgente solo por mantener una regla arcana del Senado.
Como se帽ala Mike DeBonis en The Washington Post: 鈥…los dem贸cratas ya se enfrentan a rendimientos decrecientes en cualquier legislaci贸n que finalmente se apruebe. Los estados, por ejemplo, ya han puesto en marcha sus procesos de redistribuci贸n de distritos decenales, lo que hace que sea cada vez m谩s dif铆cil, sino imposible, imponer nuevas pautas de trazado de l铆neas federales antes de las elecciones del pr贸ximo a帽o. Y con cada d铆a que pasa, se vuelve m谩s dif铆cil imponer otros mandatos electorales nacionales a medida que los funcionarios electorales estatales y locales se preparan para las pr贸ximas elecciones primarias y generales鈥
Mientras tanto el reloj sigue con su cuenta hacia adelante, y el Congreso, como el mito griego del Dios聽 Cronos, asesina a su paso, a sus propios hijos, en este caso las leyes necesarias y urgentes聽 para preservar la democracia estadounidense.
