Actualmente, Venezuela vive en una situación dual. Una parte de los venezolanos, los que pueden tener acceso a las divisas, exhiben un desapego con la situación política del país. Viven en las denominadas “burbujas” y hacen caso omiso de la realidad que padecen otros venezolanos. Por su parte, los ciudadanos que no tienen acceso a las divisas, muestran depender de las remesas de sus familiares que han emigrado o muestran una resignación por la precaria situación que viven.
No obstante, esa sociedad dual le ha aliviado la presión al régimen de Nicolás Maduro, que ya no enfrenta las protestas sociales.
La economista Tamara Herrera, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
“Ha ocurrido un alivio enorme con respecto a un deterioro sin precedentes de la economía venezolana, que llegó a sumergirse en la hiperinflación. El gobierno ha logrado sacar al país de la escala de hiperinflación, pero no de la escala de alta inflación. Es decir, no es una economía estable, además hay una enorme desigualdad y la recuperación que se comenzó a ver es incipiente y muy desigual”, afirmó Herrera.
La economista señaló que el gobierno de Maduro comprendió muy tardíamente que tenía que permitir el libre tránsito de la moneda americana para tener los beneficios que trajo la dolarización.
“La dolarización no es una propuesta gubernamental, sino que es una situación sobrevenida. Cuando a un país se le desploma la banda de dinero, se busca la moneda dura, y eso es lo que ha ocurrido. Sin embargo, todo ese proceso eliminó un elemento de incertidumbre en la economía, ya que se borró el problema que es determinar la depreciación del bolívar. Eso que acaba de ocurrir se unificó. Las operaciones entre las empresas es en dólares y eso forma parte de la recuperación. No obstante, esa recuperación es insuficiente, porque el resto de la población ha estado andando con falta de oxigeno”, explicó.
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El bolívar está casi muerto. Hoy en día en Venezuela nadie usa el bolívar y el dólar se usa libremente por las calles.
“En realidad, el problema es que no se puede avanzar más en la dolarización, con las limitaciones que está poniendo el gobierno. Lo bueno de la dolarización es incompleto. Podría haber más mejoras, pero todavía no se permite el financiamiento en dólares, es una dolarización disfuncional, y ahora crean una incertidumbre de un impuesto a las grandes transacciones”, destacó Herrera.
La experta también manifestó que el régimen de Maduro necesita cambiar su política fiscal para gastar más dinero.
“Con la cercanía de las elecciones de 2024, tendrá que poner más dinero en la calle o hacer su política más laxa. Eso podría sabotear el proceso de recuperación económica que hemos comenzado”, apuntó.
Hoy en día, la desigualdad en Venezuela es más marcada. Las clases sociales se comienzan a distanciar de una manera abismal entre una y otra.
“Es un país, que por política, no hay información estadística, puedo decir que esta disparidad es inmensa. La clase media se ha inclinado hacia un sistema de socialismo que produce una igualdad hacia abajo. Hay un deterioro enorme y un grupo poco significativo de los venezolanos solo tienen acceso a las grandes comodidades”, enfatizó.
Finalmente, Herrera destacó que si se percibe una recuperación del consumo en algunas zonas urbanas del país, de las personas que tienen acceso a dólares.
“Hay una masa laboral excluida y lo que puede pasar es que la economía crezca muy despacio, con una pobreza mal distribuida. Lo que es necesario para dar el salto a una mejora económica, es la inversión y financiamiento de los capitales que quieren retornar al país”, puntualizó.
