Vamos a la ciudad de Moscú. En la línea telefónica, al otro lado del océano está la señora Elena Bogush, historiadora y socióloga, de quien he leído una impactante entrevista en el diario El Clarín, en Buenos Aires.
CMR- Señora Elena, muy buenos días y muy buenas tares por allá. Muchas gracias por atendernos.
EB- Gracias a ustedes, buenas tardes.
CMR- He leído sus declaraciones a María Laura Avignolo en El Clarín, donde usted da una descripción muy descarnada de lo que han sido estos 92 días de guerra después de la invasión. ¿Qué es la guerra para los rusos, que ni siquiera le llaman guerra, sino operación militar en Ucrania?
EB- Mucha gente tiene miedo de pronunciar la palabra guerra porque está prohibida por la censura, que oficialmente no existe, pero que si está presente. De hecho, cualquier persona que sale a la calle con un cartel en contra de la guerra, enseguida es detenida por la policía y recibe una multa bastante alta, equivalente al sueldo mensual, o puede quedarse detenida por 15 días o más. Hablar de guerra se considera como calumnia a las fuerzas armadas. Calumnia es cualquier información que no coincide con la información oficial, que primero es muy escasa y muchas veces es bastante falsa. Por ejemplo, Se dice que Rusia no bombardea las casas y solo ataca objetivos militares. Sin embargo, mis dos hermanas están con sus familias en Ucrania y puedo obtener una información directa acerca de lo que está pasando, que muchas veces no coincide con lo que nos dice la televisión y la prensa. Para mí es una guerra que me toca personalmente y no es mi problema personal, porque en Rusia hay millones de personas que tienen sus parientes en Ucrania. En ese sentido, esto se está convirtiendo en una guerra civil porque cada uno tiene que decidir a quién apoya, a sus parientes o al presidente de Rusia.
CMR- Según encuestas oficiales del gobierno ruso, una abrumadora mayoría de la población rusa, apoya esta operación militar especial en Ucrania. Estamos hablando del 70 y 80%. ¿Esas encuestas cómo las interpreta usted, señora Bogush?
EB- Mira, he leído opiniones de varios sociólogos independientes y estoy de acuerdo con ellos que primero, no podemos hablar sobre las encuestas públicas en un país, que oficialmente no, pero de hecho vive con la ley marcial y la censura. Si tú te pronuncias en contra de lo que dice el gobierno, puedes ir a la cárcel. Entonces, mi duda es cuántas personas van a decir sinceramente que están en contra de la política del presidente o de la llamada operación militar. Segundo, he leído que ahora mucha más gente que en la época normal se niega a contestar a las encuestas sociológicas. Dicen que no y punto. Entonces, una gran parte de la población quedan afuera de estas encuestas. Y me parece bastante obvio que las personas que contestan la mayoría son partidarias de Putin o son conformistas que van a apoyar cualquier poder y autoridad. Según los cálculos independientes, puede ser una cuarta parte o un tercio de la población que si apoye la guerra. Los demás son conformistas que simplemente tienen miedo en expresarse. Si van a cambiar el discurso oficial, en pocos días también van a cambiar su opinión. No tengo ninguna fe en esas encuestas oficiales, y me parece que decir, que el 80% de la población apoya a Putin es un mal juego, porque es apoyar a la propaganda de Putin.
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CMR- Señora Bogush, usted es rusa, vive en Moscú y es historiadora. Buena parte del argumento del señor Putin, respaldado por el arzobispo Kirill, es que Ucrania forma parte de la gran Rusia, que viene desde los tiempos zaristas y se consolidó después en los tiempos del Partido Comunista Soviético. ¿Cuál es su visión de este argumento?
EB- Mire, ese argumento es absolutamente falso. Yo estudié en la escuela secundaria en Ucrania, en la época soviética. Nosotros estudiamos aparte la historia de Ucrania, como la república donde vivía. Me parece incluso que en la época de la Unión Soviética la historia era menos falsificada que ahora. Primero Rusia, como un principado, surgió en Kiev. Kiev, siempre se llamó en todos los manuales de historia, las madres de las ciudades rusas. Entonces fue en el siglo VIII; IX y X, Kiev fue el centro de la civilización rusa. Eran diferentes tribus eslavos. Las tres naciones eslavas-orientales, Rusia, Ucrania y Bielorrusia, empezaron a formarse en el siglo XVI y oficialmente Ucrania se unió con Rusia en 1653. Después poco a poco comenzaron unirse tras partes de Ucrania. Comenzó a formarse un pueblo independiente. El idioma es muy parecido, digamos como el español y el portugués. Pero a los españoles no les ocurre decir que los portugueses son unos españoles raros. Eso es lo que se dice, que el ucraniano es un ruso raro. Podemos vivir como pueblos hermanos, una gran parte de la población ucraniana habla ruso, entonces pienso que esto es una idea muy triste de Putin que quiere volver al imperio ruso o a la Unión Soviética. Putin es algo esquizofrénico porque oficialmente dijo que no quería ocupar a Ucrania ni conquistar su territorio, pero de hecho se está conquistando el territorio.
CMR- Señora Bogush, muchísimas gracias por estos minutos el día de hoy.
EB- Gracias a ustedes por su interés hacia el tema.
Estas fueron las declaraciones que la historiadora y socióloga rusa, Elena Bogush, dio en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
