El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, no se ha pronunciado este martes abiertamente sobre el resultado de las últimas elecciones en las que el candidato de izquierda Luiz Inácio Lula da Silva ganó por estrecho margen, aunque ha dicho que cumplirá con la Constitución.
Tras más de 24 horas de silencio, Bolsonaro ha comenzado su corto discurso desde el Palacio de la Alvorada agradeciendo a los 58 millones de ciudadanos brasileños su voto para después decir que seguirá la Constitución en el marco del traspaso de poderes.
El periodista de Nueva Tribuna basado en Río de Janeiro, Javier M. González, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
“Hay que decir que Bolsonaro no acepta los resultados, pero sus aliados si han reconocido los resultados de las elecciones y se han puesto a disposición para iniciar la transición. No obstante, el presidente hizo una declaración, después de 48 horas, muy rara, donde comenzó agradeciendo a los brasileños que votaron por él. Eso fue lo más cerca de reconocer los resultados. Bolsonaro se encuentra en una situación de aislamiento. Si bien, tiene sus 58 millones de votos, pero personalmente no se sabe que será de su futuro. Estará fuera del Parlamento y no tendrá cargo oficial. Vivirá del sueldo del partido y políticamente ya hay algunos perosnajes de la derecha que tienen aspiraciones para dentro de cuatro años, entre ellos el gobernador de Sao Pualo” dijo González.
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El periodista afirmó que Bolsonaro tiene 58 millones de votos y una importante representación en el Congreso, pero los que se llaman bolsonaristas radicales son solo 50.
“Bolsonaro tendrá que administrar muy bien a sus seguidores si quiere seguir siendo una referencia de la ultra derecha”, explicó.
En cuanto a la transición, el reportero informó que todavía no se han producido contactos directos, pero este jueves el Partido de los Trabajadores nominarán a una persona para que encabece el grupo negociador.
Finalmente, González destacó que Lula estará descansando en Bahía antes de una gira internacional.
“Lula ha delegado la transición en su vicepresidente electo, un gesto muy importante, porque al delegar, está reiterando que su gobierno será amplio. El gabinete no se ha comenzado a discutir, peor cada grupo, trata de imponer a sus peones en el futuro gobierno”, puntualizó.
