El presidente Joe Biden ha viajado a Texas, y ha ofrecido consuelo a los familiares de la matanza de Uvalde. Asimismo, ha anunciado una investigación a la actuación policial. El presidente insta a actuar para prevenir futuras masacres endureciendo las regulaciones de armas de fuego en EE.UU.
Sin embargo, el gobernador de Texas, Greg Abbott, y la Asociación Nacional del Rifle, siguen negando que el porte de armas es la causa de los tiroteos y alegan otros argumentos psicológicos e incluso hasta religiosos.
La periodista Joy Díaz, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
“Siempre me baso en la evidencia. Cuando comentamos algo, los comentarios del momento nos mueven y nos conmueven, pero debemos revisar la evidencia, y nos dice que el gobernador Greg Abbott corrió por primera vez en 2014, año en el que ocurrió una matanza en una base militar. Para ese entonces, pensábamos que iba a hacer algo y les dio permiso a las personas para llevar armas a las escuelas y a las iglesias. Luego, vimos siete matanzas grandes y lo único que ha cambiado en Texas, es que ahora se puede adquirir armas sin permiso. Texas se ha convertido en un santuario para la enmienda de las armas”, dijo Díaz.
Después de la masacre de Uvalde, se han producido otros 15 tiroteos masivos en varias partes de los Estados Unidos, donde han fallecido más 60 estadounidenses.
“La Asociación Nacional del Rifle afirma que lo que está pasando es que las familias se han alejado de Dios y que los padres no han hecho bien su trabajo, además que hace falta invertir en servicios de salud mental. Sin embargo, si esa es la razón, por qué no se invierte en servicios de salud mental”, señaló.
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La reportera resaltó que los recursos para los servicios de salud mental, el gobernador Abbott se los otorga a la patrulla fronteriza.
“Esto va contra toda lógica. Tenemos un estado con 254 condados y en todos hay una carencia en servicios de salud mental”, acotó.
Finalmente, Díaz destacó que no sabe si Uvlade podría ser el catalizador para que las cosas puedan cambiar.
“A veces hablamos de la gota que rebasó el vaso, pero a veces lo que falta es que la gente se canse y quizás ya nos cansamos. Este es un año de elecciones y la evidencia vendrá en noviembre. Quizás el único cambio que necesitamos es un cambio de gobernantes”, puntualizó.
