El régimen de Nicolás Maduro ha hecho acciones en las últimas semanas que se pueden considerar como actos de buena fe ante la comunidad internacional y la oposición venezolana.
Maduro permitió la entrada del Programa Mundial de Alimentos, dio casa por cárcel a los directivos de Citgo, y la Asamblea Nacional subordinada a él nombró a un nuevo Consejo Nacional Electoral, cuyos rectores se encuentran nombres vinculados a la oposición como Roberto Picón y Enrique Márquez.
El periodista especializado en política, Alonso Moleiro, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
“Estas acciones son llamados a la comunidad internacional. Maduro tiene varios cercos importantes. La Corte Penal Internacional ya ha dicho que hará un juicio sobre el caso de Venezuela y los crímenes de lesa humanidad. Por otro lado estala defunción crónica del país. También hay una presión militar para que se busque una apertura hacia afuera”, dijo Moleiro.
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En cuanto a la designación de los nuevos rectores del CNE, el periodista manifestó que el caso más emblemático es Roberto Picón.
“Hay un grupo de personas que se están anotando en una corriente que quiere una solución electoral y buscan persuadir al chavismo, algo que la oposición ortodoxa representada en Juan Guaidó no está de acuerdo. Por el lado del gobierno buscan dividir más a la oposición y el artífice de esto es Jorge Rodríguez. Ahora la oposición debe reconocer al CNE y a la Asamblea Nacional electa en 2020”, explicó el reportero.
Para el periodista la oposición vuelve al dilema si competir o no en las elecciones.
“Es importante el nombramiento de nuevos rectores. Hay una apertura que no significa que Maduro esté a punto de caer. Él mantiene el control de Venezuela, pero tiene muchos frentes abiertos”, agregó.
Ante este escenario la oposición sigue dividida, porque Juan Guaidó criticó inmediatamente la designación del nuevo CNE.
“La postura de las dos corrientes de la oposición no son irreconciliables, porque el compromiso por la democracia del sector de Guaidó es claro. Si es irreconciliable con el grupo de Henry Falcón. Un problema es que Henrique Capriles, un dirigente honesto y emblemático actúa con saña contra Leopoldo López. Eso es poca claridad estratégica. La cuestión es que hay un problema personal entre Leopoldo López y Capriles”, puntualizó Moleiro.
