El 28 de octubre de 2019 se realizaron las elecciones en Brasil que ganó Jair Bolsonaro con el 55.13% del voto popular. Hoy a pocos meses para las nuevas elecciones, el 2 de octubre próximo, Bolsonaro pone en duda la fiabilidad de los votos.Ha dicho: “ Queremos elecciones limpias y auditables. No puedo participar en una farsa respaldada por el presidente de la corte electoral”.
Paolo Manzo periodista, corresponsal medios extranjeros en Brasil, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
“La principal característica es que cuando asumió la presidencia, Bolsonaro comenzó a colocar a militares en ministerios y en posiciones estratégicas, lo que prácticamente resultó en una novedad que no se veía desde los años de la dictadura. Después, a partir de 2020, cambió un poco las configuraciones de los ministerios luego de un mayor alineamiento de gobierno de Bolsonaro con el centro, cuando tenía que asegurar una mayor gobernabilidad. También hay otros aspectos de lo que hizo y lo que no hizo, y por su actitud irresponsable ante la pandemia, donde favoreció aglomeraciones y criticó la vacunación”, dijo Manzo.
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Para el periodista, el peor error de Jair Bolsonaro fue su gestión de la pandemia.
“Tanto es que hay una Comisión Parlamentaria de investigación de la COVID-19, que pidió la acusación del presidente por los presuntos delitos cometidos durante la pandemia. Eso lo hizo caer más en su popularidad. Ahora, este año que es electoral, Bolsonaro tiene la buena suerte que los brasileños ya se olvidaron y la mayoría piensa que dirigió en buena forma la pandemia”, apuntó.
En cuanto al mayor acierto, Manzo señaló que fue la aprobación de la reforma del seguro social
“El hecho de que extendió e hizo una reforma de pensiones y logró aprobar la autonomía del Banco Central, y aumentó los subsidios que el mismo Lula había introducido. Esto hace que tenga algún chance de ser reelegido”, agregó.
Una de las polémicas que ha desatado Bolsonaro, es que ha dicho que si pierde será por fraude.
“En estos momentos, hay una distancia de 10 puntos entre Lula y Bolsonaro, pero si la brecha se reduce, Bolsonaro aplicará el mismo libreto de Trump, no admitirá la derrota. Los mismos asesores de Trump, son los que asesoran a Bolsonaro”, acotó.
Finalmente, Manzo destacó que el presidente más importante de América Latina, todavía no ha hablado con el presidente de Estados Unidos.
