FA/CMR
Casi dos minutos de breve conversación con rostros animados y empáticos. Dos minutos en donde parecían borrarse todas las tragedias humanas que el dictador ha provocado a los venezolanos.
¿Los protagonistas? El presidente francés Emmanuel Macrón y Nicolás Maduro. Lo que está de fondo, es la necesidad de volver a integrar a Venezuela al escenario mundial en medio de una crisis de energía y como paso hacia ese camino, una excusa para poder limpiar el rostro de Europa, definir el camino hacia nuevas elecciones en Venezuela.
Es Real Politik. La necesidad práctica de energía de Europa es real y urgente.
Macron que en el 2017, llamaba a Maduro dictador, sin embargo, le dijo “Presidente” en ese encuentro protagonizado en el entorno de la COP 27 en Egipto. Es un abierto reconocimiento al rol del venezolano.
Las negociaciones tienen fecha y ocurrirán de forma privada en el Paris Peace Forum este viernes 11 de noviembre a las 6 de la tarde hora local. Por el régimen estará Jorge Rodríguez y por la Plataforma Unitaria, Gerardo Blyde. Se espera que también les acompañe el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior y de Seguridad Común, Josep Borrell
Según Caracol, en esta reunión también podría estar incluido el presidente colombiano, Gustavo Petro, quien se ha ofrecido como mediador en las negociaciones del chavismo y la oposición y quien también está invitado a participar en el Foro de París por la Paz.
Recordemos que la semana pasada Petro estuvo de visita en Venezuela y allí quedó claro su rol como posible mediador.En el acuerdo entre Petro y Maduro, se señala que:
“El presidente Gustavo Petro augura el mayor de los éxitos en la reanudación de la mesa de diálogo entre el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela y la oposición venezolana, para lo cual estamos a su disposición”
Antes de levantarse de la mesa de diálogo en México y suspender los encuentros el año pasado, había tres temas sobre la mesa. Como primer punto, el levantamiento de sanciones internacionales que ha sufrido el gobierno de Nicolás Maduro, argumentado bajo la necesidad de superar la difícil situación económica que atraviesa el país. El segundo punto es la celebración de elecciones democráticas que tengan plenas garantías, punto para el que la oposición pide la veeduría y participación activa de la comunidad internacional. El tercero, la ayuda humanitaria internacional para atender a la población que se encuentra en situación de pobreza y pobreza extrema.
A la realpolitik se le reconoce como pragmatismo en política, la moral, los derechos humanos no entran en juego. Si la oposición venezolana no ha logrado destrabar la situación, y no se prevee que lo logre con las estrategias y posiciones actuales, y el mundo necesita el petróleo venezolano, que está limitado justamente, por las acciones globales hacia el régimen de Maduro, pues no importa cuan maquiavélicas o amorales luzcan las medidas, la realidad y la urgencia se imponen. La oportunidad la pintan calva, reza el refrán.
Sin embargo, la política no recorre los mismos caminos que la justicia, no lo olvidemos.
