El Coronavirus en Venezuela sigue siendo una incógnita. Hasta el momento no se ha visto un desbordamiento de la situación como muchos expertos anticipaban. Nicolás Maduro anunció que la curva se ha ido aplanando, pero la realidad es que solo dos laboratorios en el país están autorizados para aplicar las pruebas del COVID-19. En este sentido, se asume que debe haber un subregistro importante.
Manuel Enrique Figuera, médico internista, infectólogo y vicepresidente de la Sociedad Venezolana de Infectología, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido este martes por Mariana Reyes, quien suplió a César Miguel Rondón.
“Hay que entender que las cifras oficiales reflejan la capacidad del Estado de hacer pruebas y eso muestra un subregistro importante. En Venezuela solo hay dos laboratorios autorizados para hacer las pruebas de COVID-19 que son el Instituto Nacional de Higiene y el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas. Eso es una limitación para los Estados que están lejos, ya que los resultados tardan dos o tres semanas en llegar. También hay muchas personas que han fallecido con síntomas de COVID-19, pero que en ningún momento se les hizo las pruebas. Esto genera un subregistro. Hay que entender que todos los países tienen un subregistro, pero en Venezuela debería ser mucho mayor, porque somos el país de Latinoamérica que tiene menos laboratorios autorizados para realizar las pruebas”, indicó Figuera.
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Cuando se habla de subregistro, es hablar de más número de contagios. Sin embargo, queda la duda de cuánto podría ser el cálculo de contagios en Venezuela, donde no hay mayor información.
“Porcentualmente la única forma de saberlo es conocer cuántos son los casos reales. En España por ejemplo, por cada caso detectado habían 10 casos más circulando. Si extrapolamos esas cifras en Venezuela tendríamos 10 veces más casos, que daría una cifra de casi un millón de contagios. Aquí hay reporteros que han hecho trabajos muy serios, uno de ellos reportaba que un período de tiempo se produjeron más de 500 fallecidos en el Hospital Universitario de Maracaibo por síntomas de COVID-19, mientras que las cifras oficiales solo reflejaban 60″
Ante este panorama, la interrogante es en qué momento de la pandemia se encuentra Venezuela y si la curva de contagios se está aplanando realmente.
“El COVID-19 no se comporta de forma simétrica en Venezuela. Probablemente en la zona central y en Caracas los casos están disminuyendo. Eso lo sabemos de forma indirecta porque el ingreso en centros de salud ha disminuido, pero en Carabobo y Yaracuy han aumentado. Un factor importante es la falta de gasolina. En Venezuela no es comparable con otros países porque no hay gasolina, no hay movilidad de personas, tenemos todos los aeropuertos cerrados y la falta de trabajo hace que los números de contagios disminuya”, destacó el doctor.
