El primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, anunció este domingo que los alcaldes del país podrán clausurar las zonas más concurridas de sus ciudades en caso de aglomeración. Esto, con el objetivo de frenar los contagios de COVID-19 que se han disparado en los últimos días.
Los regidores podrán tomar esta medida a partir de las nueve de la noche, si detectan que en un zona se genera amontonamiento de personas.
Por tanto, el nuevo decreto podría afectar a las áreas de fiesta nocturna u otros sectores específicos.
«No podemos perder tiempo para evitar un nuevo confinamiento general. El país no puede permitírselo», justificó Conte en rueda de prensa.
En el texto divulgado con el decreto se lee que «los alcaldes disponen el cierre al público, tras las 21.00, de calles y plazas de las ciudades donde se creen aglomeraciones». Sin embargo, se permitirá entrar a la zona a quienes acudan a sus comercios «legítimamente abiertos» o a sus domicilios.
La reciente medida adoptada en Italia tendrá validez hasta el 13 de noviembre.
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Giuseppe Conte hace este anuncio cuando el país registra una media de unas 9.000 infecciones diarias desde la última semana.
Este 18 de octubre se detectaron 11.705 nuevos positivos, la cifra más alta de la pandemia en el país, aunque ahora se hacen muchas más pruebas que al principio.
El Gobierno convino estas medidas con los representantes de las regiones, que se opusieron a propuestas que habían sonado en los últimos días como el cierre de los gimnasios y piscinas, algo que finalmente no se ha llevado a cabo.
De todas formas, Conte ha dado a estos centros deportivos el plazo de una semana para respetar los protocolos sanitarios.
«Si no es así, lo avanzo, la semana que viene nos veremos obligados a cerrarlos», avisó el primer ministro.
Sigue vigente en Italia el cierre de bares y restaurantes antes de la medianoche
El decreto implica algunas modificaciones de lo que ya estaba establecido.
Desde ahora los restaurantes, heladerías, bares, pub o bares que no permitan sentarse a su clientela deberán cerrar a las seis de la tarde, aunque el reparto a domicilio seguirá permitido.
En los restaurantes además solo podrán sentarse a la misma mesa un máximo de seis personas.
Las salas de juego, de apuestas y bingos solo podrán abrir hasta las nueve.
¿Qué pasa con las escuelas?
En cuanto al sistema educativo, las lecciones en las escuelas de primaria seguirán siendo presenciales, al considerarlas «un activo fundamental».
Ya desde secundaria «se favorecerá métodos más flexibles» y se organizarán entradas por turnos.
El primer ministro reconoció que entiende los sacrificios de los empresarios afectados por esta medida pero prometió ayudas.
Italia permanecerá en estado de emergencia hasta el 31 de enero del año que viene.
En Conexión/ EFE
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