Los comandantes de las últimas unidades ucranianas estacionadas en la enorme planta siderúrgica Azovstal en Mariupol han recibido la orden de «salvar las vidas de su personal», según el comunicado del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania.
Alexander Krebeth, editor internacional del medio ucraniano ZN, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
“Se estima que cerca de 1.000 soldados han salido de la planta siderúrgica de Mariupol y todos han sido conducidos a territorios controlados por Rusia. Entendamos que todo esos territorios están tomados por los rusos. Los que están heridos han sido llevados a hospitales y los que no, están bajo control y custodia de los soldados rusos”, dijo Krebeth.
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En principio, se había hablado de un eventual intercambio de estos soldados ucranianos, por rusos que están prisioneros en Ucrania.
“Si, inicialmente se había hablado de eso e incluso el presidente Volodymyr Zelensky lo había anunciado. No obstante, en la Duma muchos parlamentarios rusos se negaron a un intercambio”, agregó.
Finalmente, Krebeth destacó que un parlamentario ruso sugirió levantar la pena de muerte y ejecutar a los soldados ucranianos prisioneros.
“Ese podría ser el destino de estos soldados que se entregaron luego de semanas de resistencia y batalla en la acería de Mariupol”, puntualizó.
