Terminó la Cumbre del G7 con un compromiso de mil millones de vacunas contra el COVID-19.Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, logró el respaldo del resto de líderes hacia una postura más firme con China y se va con la mente puesta en el próximo cara a cara con su homólogo ruso, Vladímir Putin.
El corresponsal en Reino Unido e Irlanda de El País, Rafa de Miguel, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
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“Es la primera reunión del G7 en casi dos años. Los aliados se han vuelto a reunir en Reino Unido y lo han hecho con un mensaje claro: tienen una responsabilidad ante la pandemia del COVID-19 y deben estar juntos contra el desafío que significa China. Hay un compromiso multimillonario para afrontar la pandemia y también acordaron una respuesta para la nueva ruta de la ceda de China. Algo muy importante es que acordaron dar vacunas a los países más pobres”, dijo de Miguel.
No obstante, el periodista considera que el G-7 no se ha realineado por completo, aunque si opina que la reunión puede marcar las tendencias geopolíticas de ahora en adelante.
“El factor fundamental de estas nuevas reuniones es como lo dijo el presidente Biden, Estados Unidos está de vuelta a la mesa de negociación. Eso tiene un impacto internacional que permitirá avanzar en el multilateralismo para afrontar los desafíos que vienen por delante”, agregó.
En cuanto a la reunión de Bruselas, de Miguel advirtió que el objetivo fundamental será dar el mensaje de que se refuerza la alianza transatlántica. “La idea es demostrar que las confrontaciones entre Estados Unidos y la Unión Europea se terminaron”.
