La dura derrota electoral que sufrió el oficialismo en las primarias legislativas del último domingo en Argentina, provocó una fuerte crisis en el gobierno de Alberto Fernández. Este miércoles, presentaron su renuncia cinco ministros y otros funcionarios de menor rango, que responden políticamente a la vicepresidente Cristina Fernández de Kirchner.
Gustavo Córdoba, consultor y analista político, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
“En general, decimos que estas elecciones intermedias nos otorgan dos cosas. Por un lado es una suerte de plebiscito para la gestión presidencial. Igualmente, permite un reacomodamiento interno de los liderazgos de los distintos espacios políticos. Por ejemplo, en juntos por el cambio, el principal espacio opositor, quedó claro que el ex-presidente Macri perdió terreno, y lo ganó Horacio Rodríguez Larreta, actual jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires”, dijo Córdoba.
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En cuanto al espacio oficialista, la derrota fue desproporcionada.
“Lo que vemos es el reacomodamiento del oficialismo, ante la derrota. Lo que no hemos visto todavía, es una lectura humilde de los resultados y una acción en consecuencia. Una de las cosas más concretas es la idea de cambiar el gabinete, pero todavía no hay un diagnóstico de cuáles fueron las políticas rechazadas incluso por sus propios votantes. El dato más significativo es que la oposición mantuvo su caudal electoral, pero el oficialismo, que hace dos años fue votado por 12 millones de argentinos, en esta elección fue votado por 6 millones”, destacó el analista.
Para Córdoba, uno de los errores más costosos del gobierno de Alberto Fernández, es el intento de “ganar poder interno a merced de la elección”, señaló.
“A pesar del error político del kirchnerismo, la dirigencia política ha actuado muy bien, porque todos los sectores coincidieron de que no había riesgo institucional. En el fondo la sociedad argentina tiene niveles de insatisfacción muy altos con su propia dirigencia”, puntualizó.
